Líderes Calasancios, “Crecer, amar y servir”

Este proyecto está dedicado a todos aquellos que desde el silencio de su actividad y servicio pasaron humildemente haciendo el bien desde la capacidad de su inteligencia, la riqueza de su espíritu, el brillo de sus valores… a todos ellos, presentes y ausentes, gracias por ayudar a otros a aprender a remar sus canoas.

Escuela de líderes:

Nosotros somos un movimiento de jóvenes voluntarios conformado por alumnos y exalumnos de la institución. Somos parte de ella desde hace más de 30 años. Dicho proyecto surge con el objetivo de generar un espacio de encuentro con uno mismo, con el otro y con Dios a través del contacto con la naturaleza, apuntando a la formación integral de los estudiantes para erigir ciudadanos activos, democráticos y comprometidos con su realidad.

Nos identifican fácilmente porque llevamos nuestra remera celeste, del color del manto de la Virgen y nuestro logo, un arbolito con una enorme copa de manos, ellas por supuesto dan cuenta de nuestra unión en el servicio y el árbol forma, también, parte de nuestra historia, ya que representa el viejo ombú que antes se encontraba en el jardín de las madres como insignia de naturaleza, vida y crecimiento, símbolo de caridad y humildad, Dios que llama y da cobijo a sus hombres. Como decía San Faustino Miguez: “sin más armas que la caridad”. Nuestro lema… “Crecer, amar y servir”, crecer en el amor para servir a nuestros semejantes, es en realidad lo que queremos lograr en nosotros y en todos aquellos que se cobijen en nuestras ramas.

Nuestra formación consta de 2 años. En el primero se trabaja principalmente las técnicas de campismo, al finalizar el curso, se realiza el RAID (camino) como prueba, y durante el segundo año se trabaja los aspectos pedagógicos, el trabajo con grupos, dinámicas, roles, tipos de liderazgos, ya que, durante este período, los jóvenes comienzan a colaborar en los talleres de Convivencia junto a los profesores. En todo momento crecemos en nuestra espiritualidad calasancia que acompaña toda la formación. Las flechas (piedra, cobre y plata) son entregadas cómo insignia de culminación de cada etapa, simbolizan “el camino a seguir”, el “buscar y encaminar”, que nos invita a continuar adelante, a superarnos.

Siempre son bienvenidos a participar de la propuesta. ¡Los esperamos!